La Calumnia pro taurina de un tal Marqués

Amigos antitaurinos y defensores de los animales:
Hoy, en la revista' Caretas', un sujeto que dice llamarse 'Marqués de Valero de Palma' Nos acuso a los miembros de 'Perú Antitaurino' de recibir y repartirnos dinero 'a raudales' de ONGs noreuropeas, lo cual es totalmente falso e indignante. No sólo no recibimos un centavo de ninguna ONG, sino de nadie. El dinero para lapiceros, tableros, banners y planillas, sale de nuestros bolsillos.
Este señor tendrá que retractarse y disculparse publicamente, sino, se tendrá que atener a las consecuencias que le acarreen las acciones legales que -con todo derecho- le iniciaremos.
Pero no conforme con su infamia, en dicho artículo se queja de la reciente prohibición del ingreso de menores de edad a estos bárbaros y sangrientos espectáculos. Sugiere, sin avergonzarse, que debería permitirse a los niños el asistir a estar orgías de sangre y de dolor indescriptible.
Mejor lean ustedes mismos.
(Recomiendo hacerlo con el estómago vacío)
Es francamente repugnante

Un caso claro de exclusión social entra al ruedo.

Un Lío que se Avecina

Compartir: Facebook Twitter

Antitaurinos que ignoran diversidad cultural de la fiesta encuentran eco en el Congreso.

Que Lima vive de espaldas a las regiones que forman el Perú es cosa sabida que viene de siglos atrás. Que en los últimos años se ha regionalizado el país con el fin de que los habitantes del interior puedan plasmar sus necesidades y convicciones para trasladarlas a todas las instancias superiores y gubernamentales que están en Lima es todo un intento que no está funcionando a cabalidad en muchísimos casos. Vayamos al aspecto taurino. ¿Sabía usted que el país taurino, junto con Francia, que más ha crecido en afición y en plazas en los últimos años es el Perú? ¿Sabía usted que sólo en Cajamarca hay 3 plazas de toros que tienen casi el aforo de la plaza de Acho? ¿Sabía usted que hay cerca de 300 plazas firmes en diferentes localidades y que muchas de obras se han edificado en los últimos años? ¿Sabía usted que hay más de 600 pueblos con manifestaciones taurinas en sus fiestas patronales? Probablemente no lo sabía. Y no lo sabía porque el Perú profundo, simplemente, está olvidado e ignorado por usted. Perdóneme por estas reconvenciones. Estoy escribiendo no para mis lectores habituales sino para el ciudadano de a pie que es el que más abunda. Bien. Queda claro que el Perú no sólo es Lima ni la plaza de Acho y que ésta sólo alberga a un 1.5% de los espectadores del país. Y aquí hay un gran problema. Veamos.

El 11 de enero de 2012, la Comisión de Cultura del Congreso aprobó el Proyecto de Ley 546 con que se pretende prohibir el ingreso de menores de 18 años a los espectáculos taurinos. El Presidente de la Comisión de Cultura es el fujimorista Julio Rosas Huaranga. El espíritu de esta Ley está liderado por el Ministro de la Producción, José Antonio Urquizo Maggia, tránsfuga aprista que se subió al carro de Gana Perú. Uno de sus asesores es Róger Torres Pando, quien fue presidente del Frente Antitaurino del Perú. Estos señores y su proyecto olvidan que el Tribunal Constitucional ha establecido que los espectáculos taurinos son culturales y forman parte de la diversidad cultural del país. (Sentencia del 19 de abril de 2011 Exp. N° 017-2010). También este proyecto viola el artículo 17 de la Constitución, que señala que el Estado está obligado a “preservar las diversas manifestaciones culturales” y “promover la integración nacional”. Viola el artículo 2° de la Constitución, porque restringe la libertad esencial de las personas para decidir y asistir al espectáculo de su elección y al derecho de los padres a decidir lo mejor para sus hijos (desarrollo de la libre personalidad). La síntesis liberal de esta última violación es la que le ha servido al Presidente de Francia Sarkozy para dar el permiso legal definitivo a las corridas de toros y a que los menores de edad puedan verlas acompañados de sus padres, ya que estaba Francia muy amenazada por el dinero a raudales que en todo el mundo mueven ciertas ONG´s noreuropeas en contra de los toros. Cosa que ocurre en Perú también con esos “antitaurinos jovencitos y vociferantes” que no tienen idea de nada pero se reparten el billete transoceánico que les llega.